ES
ES
EN
FR
IT
PT
DE

Leyendas de la Alhambra

6 Leyendas de la Alhambra que debes conocer

Hablar de la ciudad de Granada y de la Alhambra es hablar de las miles y miles de historias y leyendas que el paso de los años ha legado a una de las ciudades más importantes de su época. Y es que la historia de Granada también está hecha de los cuentos y dichos que, de boca en boca, han pasado por sus habitantes generación tras generación. Gracias a este saber hemos podido conservar la parte de la historia de Granada más intimista y popular.

La Leyenda del Suspiro del Moro y la Alhambra

La Leyenda del Suspiro del Moro es una de las leyendas de Granada y la Alhambra más conocidas. Según se dice, Boabdil, el último rey de Granada, se rindió a los Reyes Católicos en el año 1492 sin ofrecer resistencia. Tras esta conquista, el Rey Fernando de Aragón y la Reina Isabel de Castilla exiliaron a Boabdil y a su Corte, permaneciendo en las Alpujarras hasta su marcha definitiva al continente africano.

Según la leyenda, camino a su destierro, el derrocado Boabdil no se atrevía a girar la mirada hacia su amada Granada. Sólo cuando estuvo lejos, a 12 kilómetros de la ciudad, hizo una pausa para mirar atrás y observar la Alhambra. En ese momento suspiró y rompió a llorar. Entonces, su madre Ayesha le reprendió con la famosa frase: “Llora como mujer lo que no has sabido defender como un hombre”. Desde entonces, el paso de montaña donde ocurrió el suceso es conocido como Puerto del Suspiro del Moro.

La Leyenda del Reloj de Sol

Algunos estudiosos afirman que el conjunto de Palacios Nazaríes de la Alhambra fue ideado como un enorme reloj de sol. Viendo la disposición de las sombras que se producen en las diferentes estancias, se puede conocer la hora del día, un efecto que se acentúa especialmente al mediodía, cuando las sombras dividen las estancias en dos mitades.

Hay quienes sostienen que este efecto es fruto casual de la búsqueda de los arquitectos por aprovechar al máximo la luz solar, mientras otros consideran que fue un diseño intencionado para resaltar la armonía entre naturaleza y arquitectura.

La Historia del Soldado Encantado

Cuenta la leyenda que en las dependencias de los Palacios de la Alhambra habitaba un soldado maldito que debía custodiar por siempre el tesoro del rey Boabdil. Este soldado sólo podía abandonar su guardia una vez cada cien años. Un estudiante salmantino fue quien lo encontró y, tras escuchar su historia, aceptó ayudarlo a romper el hechizo.

El estudiante debía llevar a una joven cristiana y un sacerdote en ayunas para completar el ritual. Sin embargo, el clérigo rompió el ayuno al abalanzarse sobre los manjares del tesoro, condenando al soldado a su maldición eterna.

La Leyenda de la Sala de los Abencerrajes de la Alhambra

La Sala de los Abencerrajes, situada en el Palacio de los Leones, destaca por su impresionante cúpula de mocárabes en forma de estrella de ocho puntas. Sin embargo, sobre esta sala recae una leyenda sangrienta: en ella fueron degollados los caballeros Abencerrajes, guerreros del norte de África que habían venido a luchar contra los cristianos.

Según la tradición, los caballeros fueron llamados a Palacio y traicionados, siendo asesinados en esta sala. Se dice que una mancha en la pila de mármol del centro es un vestigio de la sangre derramada en aquel fatídico día.

La Leyenda de los Azulejos de Mexuar del Palacio de la Alhambra

La Sala de Mexuar, una de las más antiguas de la Alhambra, albergaba un azulejo que decía: “Entra y pide. No temas pedir justicia que hallarla has”. Según la leyenda, el sultán solía esconderse detrás de una celosía para escuchar los relatos de quienes buscaban justicia, impartiendo decisiones más objetivas gracias a este método.

La inscripción reflejaba la confianza y respeto que el pueblo tenía hacia el sultán, considerado un gobernante justo e íntegro.

La Leyenda de la Reina Zoraida y la Alhambra

Zoraida, una de las esposas del sultán Muley Hacén, era una noble cristiana llamada Isabel de Solís, capturada y convertida al islam. Tras casarse con el sultán, fue conocida como Zoraida, que significa “Lucero del alba”. Su historia está llena de intrigas palaciegas y rivalidades que debilitaron la Corte en los momentos finales del reino nazarí.

La Torre de la Cautiva en la Alhambra lleva su nombre en honor a esta leyenda, que combina amor, política y traición.